Un fin de semana en Malta

El archipiélago maltés se encuentra justo en medio del Mediterráneo, al sur de Sicilia y al norte de África. Consiste en pocas islas, de las cuales solo tres están habitadas: Malta, Gozo y Comino, con una población total de 400 000 personas. Malta es la isla más grande y, siendo el centro cultural y administrativo, también la más importante. Si le interesan torres medievales, las estructuras humanas más antiguas del mundo y las capillas del camino, entonces Malta es un lugar que tiene que visitar, ya que la isla se conoce como un “museo al aire libre”. ¡Eche un vistazo a nuestra guía para un maravilloso fin de semana en Malta!

Llegar a Malta:    

  • En avión: Malta dispone de excelentes conexiones internacionales. La aerolínea nacional, Air Malta, dirige vuelos desde y hacia los principales aeropuertos de Europa, África del Norte y Oriente Medio. Otras aerolíneas tradicionales y varias aerolíneas de bajo coste también operan regularmente desde y hacia Malta. Coja las líneas X1, X2, X3 y X4 para viajar hacia y desde el aeropuerto.
  • En barco: las islas maltesas están incluidas en varios itinerarios de cruceros y proporcionan una base o una escala excelente para navegar por el Mediterráneo. También puede viajar directamente a Malta en uno de los transbordadores programados desde varios puertos mediterráneos.

Día 1 – La Valeta

El primer día siempre está reservado para la ciudad capital. La Valeta es quizás la capital europea más pequeña, pero definitivamente es una de las más interesantes también. La ciudad está protegida por una serie de murallas, fortificaciones y zanjas, construidas en el siglo XVI como un sistema de defensa contra los invasores turcos. Comience su día con una vuelta en un dghajsa, el taxi acuático maltés tradicional. Es la mejor manera de ver la ciudad desde la perspectiva de los ex atacantes y crear la impresión de los imponentes muros de piedra caliza que protegen la ciudad. Al momento solo quedan unos pocos botes, pero le recogerán en Valletta o en el litoral Vittoriosa (en las Tres Ciudades) y le llevarán en un recorrido de media hora por el puerto y todos sus riachuelos. Durante su tour por el Gran Puerto de La Valeta, se encontrará con enormes cruceros, lujosos yates y pescadores locales que ganándose la vida. El precio es de 8 euros por persona, con un mínimo de dos personas y un máximo de seis por barco. Una vez que haya vuelto a tierra firme, coja el ascensor al otro lado de la calle y visite los jardines Upper Barrakka para disfrutar de las impresionantes vistas de la ciudad y el mar, pero también de las Tres ciudades: Senglea, Vittoriosa y Cospicua. Para aquellos de ustedes que no sepan mucho sobre la historia de Malta, estas ciudades han sido senderos del comercio, la migración, los encuentros y el intercambio cultural durante siglos.

Después le recomendamos un paseo por la concatedral de San Juan, la iglesia más impresionante del país. Dentro, en el Oratorio, va a poder ver la brutalmente realista Decapitación de San Juan Bautista, que ocupa casi toda la pared. El sitio es una joya del arte y de la arquitectura barroca y definitivamente merece la visita. Las diversas capillas de la Concatedral de San Juan reflejan las diferentes “langues” (regiones) de los Caballeros de Malta que provenían de muchos países diferentes de Europa. Los elementos más destacados son la Capilla de la Langue de Aragón, la Capilla de la Langue de Francia y la Capilla de la Langue de Italia.

Después de la Concatedral, camine por la Calle de la República para admirar al área alrededor de la Plaza del Palacio en su camino hacia el Palacio del Gran Maestro, el edificio más magnífico de La Valeta, con muchas tiendas, cafés y restaurantes. Parte del edificio ahora se utiliza como la Cámara del Parlamento y la oficina del Presidente de Malta. El resto del edificio está abierto al público como museo. Después de la visita, haga una pausa en el famoso Caffe Cordina, fundado en 1837, y pruebe el ‘Kwarezimal’, un pastel maltés tradicional que normalmente se prepara durante la Cuaresma.

También debería visitar la Casa Rocca Piccola, el único palacio de propiedad privada en La Valeta abierto al público. Va a estar vagando por habitación tras habitación de tesoros aristocráticos y podrá ver una estatua de mármol de la diosa Diana que mira desde arriba a una mesa bellamente puesta. Para una experiencia más íntima de este hogar, intente obtener una visita guiada con uno de los miembros de la familia que aún viven en el palacio.

Continúe descubriendo Malta en el cercano Museo Nacional de Arqueología, donde podrá ver herramientas, joyas y figuras de piedra que datan de 5200 aC. Destacan la “Dama Dormida”, la “Venus de Malta”, las dagas de bronce, el colgante de Horus y Anubis y el sarcófago antropomórfico, ambos pertenecientes al período fenicio. El museo está abierto todos los días de 09:00 a 18:00 y el precio de la entrada es de 5 € (estudiantes y niños 3,50 €).

Día 2 – Mdina y La Valeta

Situada a solo 23 km de La Valeta, Mdina, la antigua capital de Malta, es un pequeño asentamiento en la cima de una colina que tiene una historia impresionante de 4 000 años. Conocida como la Cittadella (ciudadela), las fortificaciones de la ciudad se remontan al período medieval, cuando la ciudad fue gobernada por los árabes y los normandos. La influencia más obvia de la ocupación árabe es el plan laberíntico de la calles de Mdina. La puerta principal de la ciudad fue construida en 1724 en el estilo fantástico barroco. Una vez que entre por esta puerta dramática, prepárese para dejar atrás el siglo XXI. Solo se permite el ingreso de automóviles de los residentes e incluso los carteles indicadores están escritos en placas de porcelana. Asegúrese de visitar el Bastión de San Juan y al Bastión de San Martín para disfrutar de las increíbles vistas de la idílica región que rodea Mdina.

La siguiente parada es el Museo de Historia Natural de Mdina, ubicado en el Palacio Magistral de Justicia, un impresionante edificio que data del siglo XVIII. Los aspectos más destacados son las colecciones de Geología y Paleontología, con más de 10,000 tipos diferentes de rocas y minerales, así como una excelente selección de fósiles. Otras exhibiciones incluyen aves, peces, conchas, insectos y mamíferos, y exhibiciones de sus hábitats naturales. El museo también merece la pena visitar para ver el magnífico patio y el impresionante interior del Palazzo Vilhena. Justo debajo de este palacio encontrará el Museo de las Mazmorras que ilustra la historia de la vida carcelaria en la ex capital. La atracción cuenta con cámaras subterráneas, celdas y pasillos una vez ocupados por los presos. Reacreando las escenas, el museo muestra el lado más oscuro del pasado de Malta a través del contexto histórico. Está abierto todos los días desde las 10:00h hasta las 16:00h.

La ciudad está repleta de magníficas mansiones de piedra dorada construidas para la aristocracia en los siglos XV y XVI. El más imponente de estos es el gran Palazzo Falson, el segundo edificio más antiguo de la ciudad, con una serie de elegantes habitaciones construidas alrededor de un patio central en el típico estilo español medieval y un pequeño museo encantador con muchas cosas interesantes para ver.

El punto de referencia principal de la ciudad es sin embargo la enorme catedral de San Pablo, un ejemplo extraordinario del estilo barroco, terminada en 1702. En las distintas capillas de la catedral se exhiben maravillosos tesoros artísticos, y muchos de los obispos de Malta están enterrados aquí en las capillas laterales. La posesión más importante de la catedral es el ícono bizantino de la Virgen del siglo XII, ubicado en la Capilla del Santísimo Sacramento. Además, le recomendamos visitar el cercano Museo de la Catedral, situado en la misma plaza elegante como la catedral (al lado del Palacio Arzobispal) que tiene una colección pequeña pero excelente que incluye obras de Rembrandt y Durero. La entrada combinada a la catedral y al museo cuesta 5 €.

Mdina es una excelente escapada desde La Valeta, así que vuelva a la capital por la noche y disfrute de la vida nocturna maltesa. Los centros de la vida nocturna son el famoso Teatro Manoel y el Centro St James. Sin embargo, recientemente se ha introducido una nueva y vibrante escena en el paseo marítimo de La Valeta, justo debajo de las murallas de la ciudad. El área fue renovada y ahora cuenta con bares, restaurantes, tiendas y discotecas de moda.

Día 3 – Pueblo de Popeye

Todos los fanáticos de las películas probablemente ya han escuchado hablar del Pueblo de Popeye, también conocido como Pueblo de Sweethaven o Pueblo Danés. Se trata de un pueblo construido para grabar películas, que ahora se ha convertido en un pequeño parque de atracciones y un museo al aire libre. El sitio se encuentra en Bahía de Anclaje, a 3 km del pueblo de Mellieħa. Una visita a Popeye Village es imprescindible al viajar a Malta, especialmente si viaja con la familia, ya que sus hijos podrán conocer a sus personajes favoritos de dibujos animados. Esta escapada se vuelve aún mejor durante el verano porque entonces es cuando puede disfrutar de numerosas playas y calas alrededor de la zona o descansar en la cercada Bahía de Anclaje que cuenta con hamacas, duchas, zonas de baño, piscinas y una zona infantil. Uno de los aspectos más destacados de la atracción es el popular ‘Take 2 filming’, un evento en el que puedes participar en la grabación diaria y convertirte en el actor de una película de acción en vivo.

En el Pueblo de Sweethaven, además de conocer a los personajes como Popeye el Marino, Olivia, Bluto y Wimpy, puede pasear, participar en actividades como espectáculos de marionetas, la pintura facial y el modelaje de globos, visitar museos, degustar vinos, jugar mini golf y muchas cosas más. Además de estas atracciones, el Pueblo de Popeye ofrece otras actividades de acuerdo con la temporada correspondiente, como trampolines acuáticos, una piscina de juegos y paseos en bote en la Bahía de Anclaje durante el maravilloso verano maltés o un desfile de Navidad y la Ciudad de Papá Noel durante el periodo de la Navidad.

El precio de entrada al Pueblo depende de la temporada: durante el invierno, los billetes de entrada cuestan € 10,50 (para adultos) y en verano el precio es de € 15.

Horas de apertura:

  •  Temporada de invierno (noviembre-marzo): 09:30 – 16:30
  •  Temporada de primavera y otoño (abril – junio / septiembre y octubre): de 9:30 a 17:30
  •  Verano (julio – agosto): 09:30 – 19:00.

Para llegar al Pueblo de Popeye debería coger un autobús hasta la Bahía de Mellieha desde las siguientes ciudades: La Valeta: líneas 44, 45; Sliema: línea 645; Qawra: línea 48; Bahía de San Pablo: líneas 43, 44, 45, 48, 645.

Una vez allí, coja la línea 441 (10-16h cada dos horas en invierno y cada hora en verano) para llegar al complejo de diversión.

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